miércoles, 8 de diciembre de 2010

Esperando el permiso de regreso


El padre de PM había muerto hace dos años. Mi amigo PM vivía en la barriada de Pedro Betancourt en Matanzas. Las malas lenguas le dicen el pueblo de los maricones, no quiere decir que por eso, mi amigo se declarara gay durante su misión médica en Mérida, Venezuela. Hoy lo vi tristes y le pregunté:
—¿Qué te pasa PM, que te veo alicaído? —levantó su mirada y sin muchos deseos me contesta.
—Hoy hace un año que me fugué a Colombia.
—¡Pero eso fue bueno!, y todo te salió bien, mírate ahora  —trato de levantarle el ánimo.
—Malos fueron los motivos que me llevaron a huir  —me contesta.
—Cuéntamelos —le exhorté intrigada.
—Por el correo electrónico me entero que mi madre se había puesto grave en Cuba, y llamé a la jefa de la colaboración en Caracas, y le pedí permiso para salir urgente a Cuba. Ella me contestó… no te preocupes, que yo tengo que comprobar primero y después te llamó … a los dos días me avisaron de que mi madre murió, entonces la volví a llamar y le dije… ahora te pido permiso para ir a Cuba a enterrar a mi madre …y a los pocos días fue que pude llegar.
Mi amigo PM, enterró a su madre, vendió su casita de Pedro Betancourt, regresó a Venezuela y huyó a Colombia a través de la frontera. PM hoy vive felizmente con su pareja en California, pero con tristeza me decía:
—El hombre que mora sin la libertad y esperando por un permiso, vive pero no existe  —me dice.
—PM, el hombre se define en el sepulcro, porque mientras este vivo es, un ser libre, que puede cambiar su proyecto de vida y convertirse en otro hombre diferente  —le contesté.

domingo, 5 de diciembre de 2010

El I-186 es la causa del todo



Hoy 3 de diciembre, es un día feliz para muchos médicos cubanos. Sin embargo, para algunos de nosotros, los médicos desertores en el exilio americano, solo nos sirve para recordar “lo que el viento se llevo”. Hoy llamé a un amigo MB ex cirujano del hospital Calixto García, para felicitarlo, y me contestó con un tono de voz que derrochaba angustia y rebeldía .
        —El I-186 es la culpa “del todo”   —aquellas palabras me intrigaron y pensé que mi amigo ex cirujanos (hoy “limpia culo” en New York) estaba perdiendo la cordura.
        —¡MB! ¿Tú no te me estarás volviendo loco, eh? ¿qué coño es eso del I-186?  —le pregunté curiosa.
        —Es el modelo I-186 que  te envía el Board americano, para que el instituto de ciencias médicas de la
Habana te lo llene, diciendo de que tú te graduaste de médico en ese instituto, y de allí va a la consultaría jurídica internacional de Cuba, desde donde retorna al Board por DHL  —me contestó.
       —Sí, pero sigo sin entender  —le insistí.
       —La cosa esta en que Cuba, se lo devuelve al Board americano en blanco (sin llenar) y el Board te envía una carta diciendo de que no te puedes examinar de médico en los EE UU, porque el modelo 1-186 esta incompleto —al escuchar la noticia mis ojos querían salirse de sus orbitas.
        —Dime tú, ¿y nosotros entonces?
        —Nada que te ¡jodistes! y que no puedes ser médico en los EE. UU. si a Cuba no le da la gana de
llenar los dos renglones del I-186, donde el Board pregunta donde y cuando te graduaste.
En resumen
A mi amigo le conteste que no se desanimara, porque ni el tal I-186 americano, ni Cuba, van a impedir que nosotros volvamos a ser médicos. EE. UU. te da la libertad, pero también el 1-186. De las dos cosas que te da, lo más importante es la libertad y Dios se encargará de guiarnos hacia el camino, donde nuestros conocimientos médicos les sean útiles a la humanidad. La medicina no es una profesión, sino una vocación ante la vida, y no les vamos a dar el gusto a los gobernantes feudales cubanos que nos esclavicen, más allá de sus barracones. Por tanto, sino es aquí por el 1-186, en otro rincón del mundo, entonces será.

domingo, 31 de octubre de 2010

De los tontos útiles, a los inteligentes inútiles.



A los tontos útiles, no les queda otro remedio que aceptar las condiciones en que hace más de 50 años les impusieron, y no hacen nada por ver más allá de sus narices, que las promesa de salud y educación hace mucho tiempo atrás, viajaron de la pobreza a la miseria.
Los tontos útiles, ayudan a la continuidad del poder, porque a pesar de criticar el pan nuestro de cada día, quejarse por la falta de medicamentos, y la imposibilidad de comprar en las “Shopping” los zapatos de sus hijos con el salario del mes; ellos siguen, por temor, votando en las urnas del poder popular, colmando la Tribuna Antiimperialista y la plaza de la Revolución para aplaudir el discurso aprendido, participando en las rendiciones de cuentas del Poder Popular, y hablando a puertas cerradas con el vecino de al lado de “lo mala que está la cosa”.
Esta pasividad del cubano de a pie, encerrada detrás de una máscara de supervivencia llamada “doble moral”,  unida a la conducta migratoria de muchos cubanos,  es bien utilizada a favor de los inteligentes inútiles, para mantenerle el campo libre de obstáculos y tropiezos, a sus señores feudales.
Los inteligentes inútiles, forman aquella gran clase intermedia superior que les hace “el pollito de la vecina”, a los líderes del poder, son inteligentes porque conocen que bajo este tipo de represión invisible y silente, a los tontos útiles, pueden continuar favoreciéndose de las “migajas premios” que el gran rey feudal les otorga. Por ejemplo: las casas confiscadas por el gobierno, a aquellos, que a lo largo de los últimos 50 años han abandonado el país, ¿van a parar a dónde? pues a los inteligentes inútiles y ¿los viajes al extranjero con jugosos viáticos? ¿a quién se los ofrecen? a los inteligentes inútiles. Lo de inútiles está claro, porque si obtener una casa, viajar con todos los gastos pagos, reiteradamente, al extranjero, dependiera del sudor de su trabajo, nunca habrían ido de aquí a la esquina, ni tenido un techo propio.
Pero, no hay nada mejor que un día detrás de otro, en esta gigantesca rueda que es la vida. Un día, los tontos útiles, abrirán sus ojos, y los inteligentes inútiles dejarán de recibir su migaja premio, aunque para ese día, ya sea demasiado tarde el daño, NO importa, ¡cuando la dicha es buena! Porque el agua al final del camino tarde o temprano, siempre toma su nivel.

viernes, 29 de octubre de 2010

Rompiéndoles el cerco, a los vigilantes informáticos


Hace 10 años me otorgaron el privilegio de un correo electrónico,  cuando para esa época, era muy selectivo. Me firmaron la planilla: el director del hospital, la provincia de salud y luego fui finalmente, al servidor de Infomed, y allí con una sonrisa poco acostumbrada me dijeron:
     —No tenemos capacidades ahora, hasta que no se amplíe la red. Venga dentro de un mes —al día siguiente volví allí, y me hice amiga del señor CVP (Comité de Vigilancia y Protección) que me dijo:
     —El Jefe está reunido espéralo aquí en el salón, y agárralo cuando salga  —y me senté al lado de la puerta del Jefe—. Las horas pasaron, nadie salía, y decidí abrir la puerta del local de reunión y pregunté:
      — ¿Ud. es el jefe?, cuando termine quisiera hablar con Ud. —al salir quería que la tierra me tragara, pues descubrí al jefe, en pleno juego de pin pon, dentro de su oficina—. Al poco rato él salió y me dio la autorización.
      Esta red telemática, está formada por cientos de vigilantes informáticos a nivel del servidor central llamado Infomed, de los servidores de los hospitales y de los municipios de salud pública. Dichos informáticos vigilantes, tienen como contenido de trabajo la lectura de la correspondencia electrónica de todo el personal de salud, que a través de ellos, transita.      
       En cierta ocasión uno de ellos me decía:
      —¡Como hay médicos y enfermeros homosexuales… —con otras palabras—…y  tienen armado una homosexualidad electrónica! —concluyó el homofóbico informático.
     Los correos electrónicos llegan al servidor de Infomed, e inmediatamente pasan por un filtro, donde quedan atrapados aquellos correos que contengan determinadas “palabras subversivas”, y son marcados para “una revisión detallada”, por parte de la seguridad informática. Las palabras peligrosas pueden provocarle al responsable del correo, desde un castigo con limitación del servicio por unos meses, hasta la suspensión deshonrosa del servicio electrónico. Por eso al recibir un correo subversivo, nunca lo conteste, y si lo hace hágase pasar por un comunista de aquello que “comen ladrillos y cagan polvo rojo”.
   Estos vigilantes informáticos, no llenan sus barrigas únicamente, con el humilde salario de informáticos. Muchos clandestinamente, venden direcciones electrónicas a 25 cuc por mes,  a los nuevos ricos de la Habana. Por eso que nadie se sorprenda, al ver una cajera de una tienda de TRD, al dueño de un paladar ó al mesero del cabaret Pico Blanco del hotel Habana Libre, con una dirección electrónica de infomed “anclada” al teléfono fijo de su casa.
   Lo mejor del servidor de Infomed es que entre sus jefes  y los del Ministerio de salud Pública de Cuba, se reparten y disfrutan los que ellos llaman “Internet a full”, ó acceso completo y gratuito al servicio de internet desde sus casas, con la clara advertencia de que si se atreven a abrir los web site contrarios al discurso aprendido, les confiscaran sus direcciones electrónicas libres a Internet.
   De seguro que estos vigilantes pagados, nunca quedarán sin empleos, ellos pasan a ser los nuevos soldados, que protege al país contra la guerra electrónica generada por los bloggers. Por eso,  a los mercenarios informáticos de infomed, que no se confíen de sus filtros, porque ya muchas de las subversivas informaciones han esquivado el cerco de su vigilancia electrónica. 

jueves, 28 de octubre de 2010

“La paja en el ojo ajeno”….¿eso es lo que ve Ud, señor ministro de relaciones exteriores???



     ¡Felicidades! le quedo muy bien en las Naciones Unidas el discurso aprendido, basado por razones obvias, en la reiteración de lo mismo, con lo mismo. Aplicar la estrategia de quien tú sabes, de contraatacar sacando siempre a relucir los problemas de los demás, fue y ha sido siempre un modo de encubrir la verdadera respuesta a la situación del momento. Dar una explicación de por qué hoy, cientos de cubanos desempolvan los documentos de sus ancestros, para buscar una ciudadanía transatlántica, sería demasiado comprometedora. La lista de espera en la embajada de España en Cuba, para hacerse ciudadano español, ya sobrepasa el año. Para muchos cubanos de a pie, tener un abuelo español, es como una bendición del más allá. ¿Por qué será señor ministro que para muchos en Cuba, tener un pasaporte español signifique algo así, como una carta de libertad?...aunque después, no sepan que van hacer con ella. Los matrimonios falsos con cualquier extranjero, las fugas de miles de profesionales, que logran contratos fueras de las cubanas orillas, no les parecen a Ud. razones para cuestionar, algo más que la paja en el ojo ajeno. 
    No serán la falta de derechos humanos, que se respira hipóxica, lo que ha empujado a la maroma del destierro a más de cinco generaciones. Hay casi 3 000 000 de cubanos y sus descendientes, deambulando por cualquier rincón oscuro del mundo, en busca del oxígeno prohibido, del cual Ud. ahora mismo está disfrutando. Hoy los cubanos en edad laborar, para luchar contra el despido inminente, en medio de carencias abismales de medicamentos, comidas, zapatos, y ropas, buscan un refugio de supervivencia.
¡Ah! los cambios. Señor ministro no ofenda la inteligencia del cubano; todos sabemos bien que esos cambios son cosméticos, para crear una falsa apariencia de apertura. Ud. sabe bien, que no hay materias primas, para los negocios de los cuenta protistas, y si no las tienen ¿cómo van a desarrollar el negocio?
     Muchas personas en el mundo, les prestan sus subcorticales orejas, y a ellas le podrá Ud. venir con la historia del cuenta propista, pero al cubano " de a pie" no. Sin embargo, ¿por qué no dejan comprar, a ese cubano de a pie, propiedades en Cuba, y las materias primas fuera del país?, ¿por qué no dejan, que cualquier cubano de cualquier orilla, haga su pequeño negocio en Cuba, permitiéndosele una inversión extranjera? ¡Ah! pero eso ¡no!. 
   Mi estimado señor ministro, si mi consejo le sirve de algo, cuídese su hipertensión, porque cuando le suceda lo que le sucedió a los ancestros ministros del MINREX  Robertico Robaina y Felipito Pérez Roque, quienes defendía similar discurso aprendido, ya no podrá  Ud. ir a buscar su Enalapril en la reserva del CIMEQ, de la Clínica de la Seguridad ó del Hospital Ameijeiras, y sepa que el Enalapril, está hoy dentro de los 300 medicamentos en falta, por su puesto, que para la población. Por eso aproveche ahora,que tienes el “sartén por el mango”, y haga  su reservita de Enalapril.

domingo, 24 de octubre de 2010

Yoani Sánchez y los médicos desertores atrapados en diferentes orillas.


1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país.
Si en Cuba como dicen los Fidelistas “no se violan los derechos humanos”. Yo me pregunto:
 —¿Por qué a Yoani, no la dejan salir al extranjero?¿Cual es el miedo que le tienen a su menudo cuerpo en la otra orilla? ¿Será que el problema está en: su voz, su comunicación, sus artículos, su inteligencia sagaz  contra la violación de las libertades individuales y los derechos humanos en la Cuba de hoy?
En igual y contraria situación están los médicos, enfermeros y personal de la salud que desertamos y decidimos tomar riendas de nuestras propias vidas, zafándonos de las cadenas que nos convirtieron en esclavos modernos, para expresar nuestra libertad.
Aquí en la otra orilla y con fuertes desarraigos y sentimiento de destierro, vivimos muchos médicos cubanos que tenemos prohibido visitar tú orilla Yoani, de donde a ti no te dejan salir. Muchos médicos nunca pudieron ver a su madre enferma antes de morir porque Cuba les denegó el permiso de entrada. Yo pregunto nuevamente:
 —¿A qué le temen los segurosos del gobierno de Cuba, si nosotros vamos a Cuba a visitar nuestras familias? ¿Cual sería el problema que ellos temen de vernos de vuelta en ese estrecho caimán?
A ti no te dejan salir y a nosotros los médicos desertores, no nos dejan entran. ¿Será porque ya suman más de 6 000 en los último 4 años solamente en EUA? Extraña conducta paranoica se vislumbra tras esas decisiones. Por ejemplo cubanos contrarrevolucionarios que estuvieron presos en Cuba los dejan regresar a Cuba y en cambio a nosotros que lo único que hicimos fue romper nuestras cadenas y tú que lo único que haces es decir la verdad, nos castigan sin permitirnos cruzar las orillas.
Yoani, te exhorto en continuar en la lucha por salir de esa orilla y nosotros en luchar por volver a tu orilla, aunque por ahora nos castiguen amarrados a distintas orillas, un día el mar se abrirá y estas dos orillas e unirán. Por eso cada vez estoy más segura que la intensidad del castigo rojo es proporcional al sentido humano de que estamos en el camino correcto.

viernes, 15 de octubre de 2010

Memorias del 2000. Cuando, Yo era Medico en Cuba.


Mi vecina P. me comentaba, que una amiga trabajadora del sexo  (prostituta), cuando salía en sus juergas por la noche y ganaba poco dinero, ella y sus compañeras de trabajo decían:
“Hoy hemos tenido un día de Medico”.
Después de 6 años de estudios de Medicina, tres de especialista en MGI y  tres de otra segunda especialidad, y más de 15 años de graduada de médico, cada día  tengo más necesidades básicas sin resolver como: vestirme, alimentarme, transportarme y de vivienda, que en la época de estudiante, que con solo 50 pesos cubanos compraba, suficiente comida en el mercadito paralelo de la esquina.
Todos mis compañeros del preuniversitario están llevando una vida profesional mucho más recompensada económicamente que la mía.
Los fines de semana, son para poder trabajar en casa, lo que no alcanzo a terminar en la semana, cuando no tengo guardias ó me toque dormir la postguardia. Estoy más familiarizada con los problemas de mis pacientes que con los de mi familia.
Me cuestiono porque a los 17 años cuando comencé en medicina, embullada por el novio del momento, no seguí mis verdaderas inclinaciones de ser periodista, ahora recuerdo mi madre:
“Los periodistas cuando terminan su carrera —ella me decía— no tiene trabajo y lo ponen sin hacer nada a llenar papeles en el Poder Popular”.
Tomo más café durante una consulta y un guardia médica que agua en el día. Extraño los días en que podía saber lo que pasaba con las películas del Festival de Cine de la Habana. Y para ponerle la tapa al pomo, siempre aparece el viejo del CDR que me cuestiona por no hacer guardias “además en el CDR” y faltar con regularidad a las obligadas reuniones de rendición de cuentas del cadavérico poder popular.
Cada día me distancio más, y me veo obligada a responder a las invitaciones con un "No puedo, inventando algo que hacer" ó  "no puedo tengo guardias” ó “estoy de post guardia”. Cuando la razón es que no tengo un vestido decente acorde a la ocasión, o mis zapatos están viejos y deteriorados, o no tengo los CUC necesario para comprarme un tinte para mis canas.
Muchas veces amanezco sin haberme acostado, y no por farandulera, la mayoría de las veces es porque los pacientes se complican en la madrugada durante la guardia. Al día siguiente después de luchar un transporte urbano aterrizo en mi apartamento subiendo a rastras los  5 pisos de mi edificio, después de trabajar más 24 horas de gratis y si son fines de semanas enlazo 15 días seguidos, sin descansar, por un salario de miseria ( 20 dolares al mes).
Yo pregunto:
¿Cuándo los médicos  especialista y profesores de la escuela de medicina, con más de 15 años de trabajo consagrado, podremos vivir con un salario superior a los 25 a 30 dólares por mes? ¿Acaso dentro de las mudanzas actuales la clase médica cubana, lograra un beneficio? —pero infelizmente me contesto a “mi misma”.
 ___¡”Mi misma”! despierta que NUNCA lograras un beneficio, a tiempo de envejeger en la nada cotidiana. 
 Mientras sea un objetivo del gobierno que pasemos dificultades y carencias, entonces nosotros estaremos más estimulados a brindarnos como esclavos para una misión en el extranjero, nuestra única vida será un infierno vestido de blanco empujada a lanzarse de esclava a cualquier oscuro rincón del mundo, desde donde le somos más rentables al gobierno y  a sus arcas. Para nosotros esa sería la única vía de comprarles un par de zapatos, a los crecientes pies de nuestros hijos adolescentes, y los medicamentos a nuestros ancianos padres.
Por eso cuando las trabajadoras del sexo hablan de un día de Medico ¿ya UD entenderá el por qué?
El Verdadero Médico Cubano, que se sienta libre de esto ó de algo parecido, que arroje la primera piedra.


jueves, 14 de octubre de 2010

Busco un sitio en la eternidad


Busco un sitio donde

comer no sea un problema,
vivir no sea una tragedia,
el pensamiento no tenga cadenas,
expresarse no esté condicionado,
latinos, árabes, negros y asiáticos no mueran en el intento
el dinero no defina quien vive o muere,
escoger un partido o una religión sea un derecho,
el alcohol, la morfina y el cánnabis no sean para consumo,
la alegría sea dueña,
el amor reviente por los poros de la piel y las mucosas,
las personas vibren en altas frecuencias de energías emocionales,
el más rico sea el que menos necesita y no el que más tiene,

Busco un  planeta

sin fronteras sexuales, de idiomas, o de clases sociales,
que sea un solo país donde los humanos seamos sus ciudadanos,
con un gobierno democrático mundial,
donde a un cuerpo animado por un espíritu,
le crezcan alas para renacer en los rayos  de la divina belleza

Busco vivir en la eternidad.


Yo el Angel Disidente 

miércoles, 13 de octubre de 2010

¿Fuego en el Hospital Ameijeiras? ¿Donde están las fotos tomadas por los celulares?



Las habituales inestabilidades del voltaje en Centro Habana, provocaron que estallara uno de los transformadores del HHA, esto condujo a que cada uno de los otros transformadores estallara también como “efecto dómino”. Las explosiones desordenaron los tímpanos de todos en el hospital,  la conocida en Cuba “peste a cable quemado”, camino por toda consulta externa del H. Ameijeiras ubicada en su sótano, y se formo el corre-corre entonces: pacientes, acompañantes y trabajadores volaron bajo el intento humano de conservación hacia las calles aledañas, por donde único tiene salida el hospital en el sótano: Marqués Gonzales y Belascoain.
En la torre del hospital, se difundió la alarma de que el hospital cogió fuego por “culpa de las calderas” y entre las personas comentaban que si alcanzaban las tomas de oxígeno de los salones de operaciones y las terapias intensivas, podría volar el hospital.
El pánico apareció y con él la salida “como cohetes” de pacientes que bajaron por las escaleras en pijamas con sus acompañantes, sin antes coger sus maletas, otros con los sueros  sosteniéndolos en la mano ayudados por sus acompañantes.
Todos a cruzar las calles y lograr instalarse en las cafeterías de cuenta propistas y estatales, que pululan en los laterales del hospital. La solidaridad humana del cubano salió a flote de inmediato, y los empleados innovaron puestos médicos de urgencia “en campaña”, a los pacientes más enfermos los colocaron sobre las mesas, y los vecinos enseguida trajeron sus sillas y sillones para acomodar de inmediato al resto de los enfermos.
En pocos minutos aparecieron: los bomberos, las ambulancias, los carros patrulleros, y los camiones de orientales policías. Ya para ese instante el humo y la “peste a cable quemado” había desaparecido contemplándose una gran confusión entre bomberos, policías, enfermeros, médicos, pacientes acompañantes, vecinos, e “innovados puestos médicos belascoaenses de campaña”.
Del mando superior se dio la orden de “regreso a la normalidad” y los cumplidores orientales policías de la Habana, hicieron circular a la gente, sin antes aprovechar para cargar con los atrevidos que osaron sacar fotos con sus celulares. Los bomberos recogieron sus mangueras, los  médicos y enfermeros a ayudar a los pacientes a subir de nuevo y por las escaleras.
En fin “mucho ruido y pocas nueces”, (ni muertos, ni heridos) y se repararon los cinco transformadores dañados.
Pero yo me pregunto:
¿Qué paso con aquellos atrevidos que osaron sacar fotos con sus celulares? ¿Alguien pudiera contestar?

lunes, 11 de octubre de 2010

Les perdono la carrera de medicina. Yo “Quien Tu sabes” en la tierra.





Mis compañeros y yo, llegamos al teatro Lázaro Peña a las 10:00am,  como  éramos estudiantes de 6to año de Medicina, nos ubicaron en el primer piso del teatro. “Quién tú sabes” y su séquito de verdes apóstoles, ocuparon la tribuna para hablar de su gran creación “El médico de la Familia”.
La reunión era “Quién tú sabes” habla, que te habla. De vez en vez algún papagayo del discurso aprendido, recibía su permiso para repetir, aplaudir y rendir culto a su líder.  
A las 10:45 de la noche “Quién tú sabes”, da 30 minutos de merienda. A las 11:30PM reanuda sus sesiones. Mi amiga y yo al regresar de la merienda nos sorprendió ver el segundo piso del teatro VACIO.
¿Dónde están los demás? le pregunto a la secretaria de PCC.
Se fueron me contesto y nosotros nos tenemos que poner de acuerdo para salir de uno en uno sin que él se vaya a dar cuenta  nos ordena.
A las 11:45, salí por la puerta del teatro dispuesta a estudiar para mi último examen de la carrera de medicina un día 15 de Julio de 1987.
Al día siguiente a las 6:00 am al salir de mi casa la viejita del al lado me llama:
Desde las 4:00 am “La Radio Martí” está diciendo me comenta bajito y misteriosa  que más de 500 médicos anoche dejaron a Fidel ¡con la palabra en la boca! y se le fueron en su misma cara y él decidió “quitarles la carrera de medicina” — y termina su venenoso comentario llevándose sus manos a la cabeza.
La angustia desequilibro mi cuerpo y empecé a temblar de arriba abajo. Al llegar al hospital tirados debajo de unos árboles estaban mis compañeros abrazados unos contra otros llorando. Nos echaron como a perros del hospital, y nos prohibieron hacer el último examen. Nos dijeron que estuviéramos localizables dentro de nuestras  casas.
Llegue a mi casa con un llanto incontrolable. Mi padre que no entendía:
 Si te equivocaste y mataste a alguien  me decía  yo te busco un abogado —me aseguraba para tranquilizarme.
Cuando le conté se apareció casi todo mi barrio y todo el mundo gritaba:
 “Pero que se ha creído ese hombre” otro vecino preguntaba ¿quién te quito la carrera?
  —¿Quién va a ser? “Quien tu sabes” mi padre contestaba.
Después de interrogatorios, reuniones y suplicas frente al Kremlin Quien tu sabes NOS PERDONO LA CARRERA. Pero sin antes hacernos saber que a la corta o a la larga siempre nos pasaría la cuenta, pues ya nos tenía:
 ¡BIEN MARCADOS!

¿Enfermeros emergentes o instantáneos? ¿De quién fue la idea?






Era sábado en la noche y yo estaba de guardia en uno de los hospitales de Ciudad de la Habana, donde radica la minúscula vivienda, donde habitamos mis dos hijos en su segunda adolescencia, mi esposo, mi gata y yo.
A las 8 de la noche me dirijo al comedor a intentar aplacar el hambre durante la gratis guardia sin un digno refuerzo alimentario. Al salir del comedor como jefa de la guardia me paro frente a una de las salas hospitalarias a corroborar con el rabillo del ojo si “todo anda bien”. Los gritos de:
¡Ay mi madre! quítamelo que no aguanto más el dolor resonaban desde adentro.
Yo me dirijo al lugar de donde emergían los lamentos. La habitación tenía un paciente obeso sentado gritando y una enfermera aun adolescente pasándole un medicamento por la vena.
Enfermera ¿qué medicamento UD está administrando? le pregunto.
Cloruro de Potasio en ámpula pues las tabletas se acabaron —responde con la mayor naturalidad del mundo.
Yo en un santiamén, agarre la jeringuilla y se la extraje de la vena del paciente.
A la enfermera la lleve a la estación de enfermería y le pregunte:
Con quien consultaste el cambio de vía de administración del medicamento?  —le comenté muy seria.
Con nadie ¡¿a caso NO es el mismo medicamento?! —contestó con gran seguridad.
 La enfermera debido a su juventud y a los pocos meses de preparación no sabía que el Cloruro de Potasio directo en vena es la inyección letal que se aplica en muchos países para cumplir la sentencia de muerte. Cuando le conté lloraba sin parar.
A ella la dejaron sola al frente de todo una sala de medicina interna bajo el control de la enfermera supervisora como no disponían de enfermeras para el fin de semana, y si  ella tenía alguna duda que preguntara, pero ella “nunca tuvo dudas” “a caso NO es el mismo medicamento”.  
La alta decepción en la profesión de enfermería, generada por un salario de 20 dólares al mes, provocó el éxodo de estelares enfermera, y la grandiosa idea de la fabricación emergente de “enfermeras”.  Gracias a Dios el paciente se salvo, pues el cloruro de potasio en vena directo produce un dolor intolerante. La enfermera al día siguiente se fue del hospital y nunca más regreso, solo tenía 18 años.

domingo, 10 de octubre de 2010

2da parte. Orlando Zapata Tamayo. Interpretación de su foto postmorten.




Reyna Luisa Tamayo su madre  reiteró su reclamo por una investigación, porque el cadáver de su hijo presentaba marcas de golpes y torturas.
27/02/10 Enrique Ubieta —comentó en el “Granma” que Orlando Zapata era un "preso común" que fue "maquillado" de prisionero político y usado por los enemigos internos y externos de la revolución cubana. ¡”Nada”!  se dice los atropellos que sufrió  por silenciarle su petición:
“Se le diera el mismo trato que a los asaltantes al cuartel Moncada”  —según decían sus compañeros de celda.
Amnistía Internacional dice:
Debe llevarse a cabo una investigación completa para determinar si en su muerte pueden haber intervenido los “malos tratos. El resultado de la autopsia médico legal, todavía está pendiente.
En la foto de su cadáver observamos gran edema facial, de probable causa renal, secundaria a la privación de agua durante 18 días, eso disminuyo el flujo de sangre al riñón y lo llevo a una probable Insuficiencia Renal Aguda (IRA)  —por ejemplo—  como una bomba de agua que “bombea en seco” y termina “quemándose”.
El edema y la inflamación de su cara podrían justificarse, como secundarios a la rehidratación endovenosa mediante sueros, durante su estancia en el Hospital Nacional de Reclusos debido al paro en seco del funcionamiento de sus riñones “quemados” producidos por la ausencia de agua referida anteriormente. La IRA probablemente aumentara la acidez y el potasio en su sangre y generara complicaciones cardiovasculares.
Un tubo por la boca y un ventilador mecánico, pudieran ser secundario a la administración de líquido por suero que se acumuló en los pulmones y  probablemente desencadeno un edema agudo pulmonar, al NUNCA poderse eliminar  el líquido por los “riñones quemados”.
La intención de trasladarlo al Hospital Ameijeiras pudiera estar relacionada con una hemodiálisis en un intento heroico de restablecer el medio interno.
La palidez de su rostro en la foto, podría asociarse con: la hemoglobina baja (al dejar de funcionar los riñones), la desnutrición y el edema facial.
A nadie se le deja morir por “huelga de hambre”, mientras su vida dependa de una institución penitenciaria, para evitarlo es muy fácil solo hay que restringirlo, canalizarle una vena, suministrarle un suero glucofisiológico y alimentarlo por vía parenteral con aminoplasmal. ¡Claro! si NO existe el mero propósito de “apagar su voz”.

¿A qué tipo de cubano clasificas?

Añadir leyenda



El cubano de hoy está sometido a un dislocado sistema que lo convierte, en una población de difícil clasificación. Basado en su estatus actual dentro de un contexto: histórico-cultural, político-social y hasta religioso-sexual-racial, podríamos agruparlo en 5 tipos de cubanos.
I-                    Cubanos de la oligarquía gobernante: Disponen de todas sus necesidades resueltas. Ellos visten, comen y beben bien. Viajan sin permisos a cualquier parte del mundo. Disponen de autos, gasolina y buenas viviendas. Los mejores hospitales CIMEQ y Ameijeiras están todo el tiempo a su disposición. Se quejan porque “trabajan  y viajan mucho” en las mejores de las condiciones.
II-                  Cubanos que no pertenecen a la oligarquía pero desde sus puestos de jefes les hacen muy bien el circo. Tienen ropa, comida, auto y vivienda asegurada. A ellos le dan permiso para salir al extranjero aunque se los controlan a dos salidas por año. Saben manipular los viáticos, desde el extranjero para su ganancia particular. Tienen asegurada la atención médica con los mejores especialistas de sus provincias.
III-                Cubanos que no pertenecen a la oligarquía, ni son jefes, pero trabajan honradamente. Ellos tienen carencias de ropas y viven varias generaciones en una misma vivienda. Para ellos comer es un problema. No tienen autos o si lo tienen no disponen casi de gasolina. Se atienden en el consultorio del médico de familia, los policlínicos y con cualquiera que le toque en un hospital del Segundo nivel de salud. Trabajan en una colaboración cubana en otro "país hermano" en régimen de moderna esclavitud.
IV-                Cubanos que ni son jefes ni pertenecen a la oligarquía, ni trabajan honradamente:
a)       Viven de remesas familiares.
b)       Viven del invento o del lleva y trae (delincuencia).
c)       Viven con un micro negocio particular casi  ilegal.
V-                  Cubanos que se niegan a formar parte de la oligarquía y  hacerles el circo al gobierno. Cubanos que quieren vivir de su trabajo, solventar sus necesidades básicas sin llegar a convertirse en esclavos, delincuentes, ilegales o en vividores de remesas.
a)       Disidentes y desertores.
b)       Presos políticos.
c)       Exiliados o destierro forzoso.
¿Ud pudo identificar a cual número clasificó?